Lleva más de 27 años en África, y se siente
identificado con la gente de aquel continente. Es un misionero de tomo y lomo.
Su fuerte consistencia física revela un corazón grande.
Como buen salesiano trabajaba con los niños
y jóvenes, aportándoles la alegría del evangelio y la cultura que les capacita
para ser protagonista de su futuro.
|
El P. Santos con una fotografía de Benedicto XVI,
el día que el Papa visitó su misión
|
|
El P. Santos a la derecha de la foto, con el
Papa
|
|
Junto a un grupo de alumnos de la Escuela Acelerada
|
|
En la escuela Acelerada
|