• INFANCIA MISIONERA 2022


    ¡Comienza a preparar la jornada!
  • CONCURSO INFANCIA MISIONERA 2022


    Tú eres luz para el mundo
  • MEMORIA DE ACTIVIDADES 2020


    ¡Así fue 2020 en Obras Misionales Pontificias!
  • AYUDA A LAS MISIONES


    Colabora con los misioneros españoles

11 de junio de 2011

Hna. María Donoso


La Hna. María Donoso es natural de Arroyomolinos y está destinada en Perú. Nos ha enviado esta carta:

Mi Estimado P. Javier : Le saluda la hermana María Donoso

Con el deseo de que al llegar mi correo se encuentre bien con el favor de Nuestro Señor Jesús, en unión de su familia y de cuantos cerca de usted viven . Yo y mi familia todos bien gracias a Dios”.

Un poco largo es el saludo; lo he copiado de las cartas de nuestros hermanos de la selva. Por estas tierras de acá, se escucha con mucha frecuencia el nombre de Dios.

Tengo mucho gusto en saludarle. Hace tiempo que me mandó mi sobrino sus datos y cuya nota perdí y, con el favor de Dios, hoy la he encontrado.

Si no le llegó mi saludo, sí mis oraciones al Señor, sobre todo de agradecimiento por la ayuda espiritual que, a través de usted, le llega a mis hermanos, de la cual estaban muy necesitados. Pido para ellos un corazón bien dispuesto a dejarse acompañar por el Espíritu y llegar a vivir con gozo el Camino que Jesús nos entregó. Y para usted eso que más necesite para asemejarse al Buen Pastor y, fortalecido con su gracia seguir acompañando a esos pueblos al encuentro con su Dios.

Sin duda me hubiera hecho mucho bien el poder conversar con usted cuando le conocí y solo pude saludarle un momento.

Vine por primera vez al Perú en el año 1969. He vivido muchos años en la Selva Amazónica, compartiendo mi vida con los hermanos Awajún y he sido muy feliz. La naturaleza siempre me lleva a Dios y la Amazonía es para mí el lugar privilegiado para ese encuentro.

En la  actualidad estoy en Lima y, como cualquier ciudad, es el lugar donde menos me gusta vivir; son muy tristes la ciudades, mucha gente junta y la gran mayoría viven en “soledad”.

El Señor me ha regalado un lindo lugar. En mi parroquia además de la capilla principal, tenemos otras nueve capillas pequeñas en asentamientos humanos situados en los cerros, en donde construyen sus casitas como si fueran nidos de pájaros, desde hace años, la hermana que presta algún servicio en Lima, acompaña a esta comunidad, en la que un grupo de laicas, son las encargadas de las catequesis de bautismo, primera comunión, confirmación y de la infancia misionera; están entregadas a estas tareas con gran ilusión y, aunque son madres de familia, se van formando de poco a poco y mi acompañamiento es ese ir juntas conociendo más al Señor Jesús a través de la Palabra de Dios, preparando cada semana la Liturgia del domingo.

Me siento bien de haber pasado este rato compartiendo con usted. Confiando en sus oraciones y ofreciéndole las mías le dejo hasta otro momento.

Que la Paz del Señor Resucitado esté en su corazón.

H. María Donoso