
Hace 25 años murieron alanceados en un rincón de la
Amazonía ecuatoriana, Alejandro Labaka, obispo Capuchino del Vicariato
Apostólico del Aguarico, e Inés Arango, religiosa Terciaria Capuchina.
Mons. Labaka fue durante siete años misionero en China,
de donde fue expulsado por los comunistas. De ahí pasó a Ecuador, donde
permaneció desde 1954 hasta 1987. Fue Prefecto apostólico de Aguarico, en la
Amazonía ecuatoriana. Y luego el primer obispo vicario apostólico del mismo
Vicariato. En el año 1977 logró contactar con los waoranis, una minoría étnica
de la Amazonía que vivían desde tiempos ancestrales sin ninguna relación con la
civilización. Compartió la vida con ellos y escribió sus experiencias en el
libro Crónica waorani. En el año 1987, junto con la misionera Terciaria capuchina
Hna. Inés Arango, arriesgó su vida para contactar a los tagaeri, otro pueblo
oculto de la selva amazónica. El 21 de julio de ese año ambos misioneros fueron
alanceados y murieron, regando con su sangre la selva amazónica. Está
introducida su causa de canonización en Roma.
Este Congreso de Madrid quiere evocar la figura de
Alejandro e Inés, analizar sus trayectorias, su compromiso con aquel lugar, sus
habitantes y sus minorías, reflexionar sobre lo vivido y encontrado con ellos
(el obispo Alejandro tomaba sus notas en la conocida “Crónica Huaorani”)