• INFANCIA MISIONERA 2022


    ¡Comienza a preparar la jornada!
  • CONCURSO INFANCIA MISIONERA 2022


    Tú eres luz para el mundo
  • MEMORIA DE ACTIVIDADES 2020


    ¡Así fue 2020 en Obras Misionales Pontificias!
  • AYUDA A LAS MISIONES


    Colabora con los misioneros españoles

14 de agosto de 2013

Una angoleña de Segovia: la vocación religiosa de la hermana Cristina


La Hermana Verónica Cristina, de las Hermanas Misioneras de Acción Parroquial, es de Angola pero desde hace tres años vive y trabaja en Segovia, allí son conocidas como las “Carboneras”. Cristina trabaja en la Residencia de Santa Teresa donde chicos y chicas cursan estudios universitarios. También colabora en la Parroquia del Carmen y en la Parroquia de la Resurrección.
Cuenta esta misionera angoleña que conoció a las hermanas  Misioneras de Acción Parroquial desde pequeña, en su pueblo, donde había una misión. Cuando cumplió 13 años planteó a su madre que quería ser como las Hermanas de la misión “alegres, cariñosas, especialmente con los más pobres, con los enfermos...” Pero Cristina tuvo que irse a vivir a otra ciudad “porque donde vivíamos había guerra. Mi padre era profesor. En aquel tiempo en mi pueblo perseguían a muerte, a los profesores. Nos fuimos de noche todos en un camión, y allí se quedó todo; apenas  llevamos un poco de comida y ropa. Tuvimos que empezar de cero. Nos quedamos si nada, pero confiamos en la providencia de Dios, que es muy grande. Mi padre encontró trabajo enseguida y también casa. En esa nueva ciudad, Lubango, me encontré con una amiga, que iba casi todos los domingos a la casa de las hermanas a participar en la formación de las jóvenes, que querían ser religiosas. Mi amiga me invitó a participar en estos encuentros y me encontré con enorme sorpresa y alegría que eran las mismas Hermanas que conocí en mi pueblo”. Después de algún tiempo entró en la congregación “estoy muy feliz por seguir a Jesús, sirviendo a los demás. Estoy contenta también con la misión entre los jóvenes, que ahora me ha confiado la congregación”.
La Congregación de las Hermanas Misioneras de Acción Parroquial se fundó gracias al entusiasmo de la joven Genoveva Cuadrado, Madre Inmaculada. Era el día 13 de Junio de 1939; al salir de la iglesia, por la tarde, manifestó a sus amigas: ¿Por qué no podíamos fundar nosotras una nueva Congregación Religiosa? Pronto quedaron todas contagiadas por su entusiasmo, e inmediatamente se pusieron en contacto con su Párroco. Ellas deseaban consagrarse a Dios en la vida religiosa, pero sin renunciar a las tareas de la Parroquia. El 7 de Marzo de 1942 se reunieron en Segovia el grupo de nueve jóvenes que iban a iniciar la fundación y así echó a andar. Actualmente están trabajando en Brasil, Méjico, Venezuela, Chile, Angola, Mozambique y España.
Todos los años las Obras Misionales Pontificias, a través de la Obra de San Pedro Apóstol, destinan recursos a la formación de religiosas. Se pagan los gastos del primer año de noviciado de muchas religiosas en países de misión. Por ejemplo, a Angola, de donde es la hermana Cristina, se han enviado este año 12.600 dólares para ayudar en la formación de 45 novicias. La esperanza es que el ejemplo de Cristina sea seguido por muchas jóvenes como ella de países de misión