El Arzobispo de Piura, Mons. José Antonio Eguren Anselmi,
inauguró y bendijo la Casa de la Congregación de las Hermanas Franciscanas de
María Inmaculada, quienes desde este año tienen a su cargo el Colegio La
Inmaculada de Talara. Este colegio tiene 55 años de historia y es de nivel
secundario, cuenta con 1269 alumnas distribuidas en 40 secciones, 8 por año,
que ha estado a cargo de las Misioneras Dominicas desde su fundación.
Durante la bendición, Mons. Eguren les dijo a las
religiosas que esa casa es “una casa de descanso y cada una de ustedes debe
descansar en el corazón de Jesús. Descansar en el Señor a través de la oración
personal y comunitaria, a través de la Palabra de Dios, a través de la Santa
Misa y de la adoración de la Eucaristía, a través de la formación permanente.
Aprendan a descansar entre ustedes, por medio del amor fraterno, y la permanente
solicitud, servicio y asistencia. De esta manera este descansar en el Señor y
entre ustedes las fortalecerá para el trabajo evangelizador que realizan en
este colegio con las alumnas, para ayudarlas al seguimiento de Cristo, en quien
alcanzamos la plenitud de nuestra humanidad”.
Desde sus inicios, en 1958, el colegio estuvo dirigido
por las Hermanas Misioneras Dominicas del Santísimo Rosario, cumpliendo con
ellas sus Bodas de Oro el 2008. En el 2009 se encargó del colegio el Consorcio
de Colegios Parroquiales de Piura hasta el 2013, momento en el cual la
Providencia de Dios envió a las Hermanas Franciscanas de María Inmaculada para
ser las promotoras de esta entidad educativa. Cuentan con una larga presencia
en la Archidiócesis de Piura ya que tienen a su cargo desde hace muchos años el
Hogar “Santa Rosa”, lugar en el cual brindan acogida humanitaria a niños y
niñas en estado de abandono, dándoles atención, protección, albergue, educación
y alimentación






















































