Hola,
amigos:
Vamos llegando al final de
este año 2014, que ha sido muy
intenso en nuestra Parroquia de Santo de
Sábie. Nos hubiese gustado hacer
más cosas y algunas de ellas,
hacerlas mejor, pero nuestras fuerzas y nuestras capacidades dan para lo que dan. De todos
modos, nos > sentimos satisfechos con lo realizado.
Trabajamos cada día con la
convicción de que es el Señor el
que hace casi todo, y nosotros
sus pequeños instrumentos, que sueñan con un mundo mejor y más justo, ese mundo que Dios ideó y que los
hombres nos empeñamos en complicar. Resultaría largo contaros con
detalles las cosas que tenemos en marcha en esta parroquia, seguimos con varias construcciones adelante, desde el Complejo Parroquial, que ya va muy
avanzado, algunas capillas que
están en construcción, reformas y
reparaciones en los puestos de salud, ayudas a reconstrucciones de casas deterioradas de
familias sin recursos…; muchas
ayudas puntuales ante situaciones
de emergencia que nos llegan; incluso este año tenemos una tiendecita en la Misión en que
vivimos donde vendemos al precio
más bajo los artículos de primera
necesidad para hacerlos más accesibles a los más necesitados.
Por supuesto a todo esto hay que
unir el trabajo de pastoral de la
Parroquia: catequesis, isitas a las comunidades, misas, encuentros con los distintos grupos…
Me voy a detener un poco más en tres actividades de las que están en marcha, a las que dedico los recursos
que nos habéis hecho llegar. La primera es una escuela
comunitaria para niños de preescolar de 3 a 5 años- que hemos
iniciado este año en La Misión. Ha sido un gran éxito, con 30 niños que desde el mes de Mayo han tenido en la capilla
de nuestra comunidad su escuela
de lunes a viernes. Ha sido atendida por
dos chicas de esta misma población a las que hemos procurado la formación necesaria
y que han aprovechado al máximo
pues ha sido admirable lo que han
aprendido en este tiempo este grupo de niños. El lunes 15 de
diciembre hicimos el cierre con una fiesta y todas las familias agradecieron el trabajo que se ha hecho.
El
año que viene vamos a continuar
con esta escuela y vamos a
iniciar otra en una comunidad cercana. Cada escuela cuenta con dos profesoras fijas y una tercera
que llamamos de refuerzo, que
viene un día a la semana y siempre que
alguna de las otras no puede
trabajar. Cada día la escuela
ofrece una comida a los niños. Además, hay que atender todos los gastos de material necesario para
desarrollar las actividades
programadas. Las escuelas son muy
sencillas como podéis ver en las fotos, pero han sido muy eficaces y bien valoradas por los niños y por
las comunidades. En toda esta
zona no hay ninguna escuela infantil.
En segundo lugar
seguimos atendiendo los puestos
de salud que pertenecen a la
Parroquia. En este momento tenemos siete en funcionamiento Hay tres que están cerrados en este momento
porque no hay agente de salud que
los atienda. Estos agentes de salud han
desistido en algunos casos por la
falta de pago por parte del
Ministerio de Salud. Una parte de su sueldo la paga el Ministerio
y otra nosotros. Nosotros cumplimos nuestros
> compromisos pero el Ministerio pasa mucho tiempo sin pagarles y eso les desanima. Sustituir a estos agentes es muy complicado pues tienen que hacer una formación que en pocas ocasiones se organiza. Con los que están en funcionamiento trabajamos y apoyamos todo lo que podemos. Es servicio que prestan a las comunidades es muy grande. En estos puestos vamos haciendo mejoras en todo momento: construcción de depósitos de agua y letrinas
> compromisos pero el Ministerio pasa mucho tiempo sin pagarles y eso les desanima. Sustituir a estos agentes es muy complicado pues tienen que hacer una formación que en pocas ocasiones se organiza. Con los que están en funcionamiento trabajamos y apoyamos todo lo que podemos. Es servicio que prestan a las comunidades es muy grande. En estos puestos vamos haciendo mejoras en todo momento: construcción de depósitos de agua y letrinas
El tercer programa que os comento es uno puntual que hacemos en este mes de diciembre. Lo llamamos
Khisimusi, que es la palabra con
la que en changana nos
felicitamos la Navidad. Con esta actividad ofrecemos una cesta de comida básica a las familias más
necesitadas de nuestras
comunidades. Hemos previsto
atender aproximadamente a 150 familias de nuestras 12 comunidades Principalmente nos dirigimos a ancianas solas
y abandonadas de sus familiares madres solteras con varios hijos a su cargo y
personas enfermas. La cesta que
ofrecemos tiene 3 kg de harina de maíz,
tres kg de azúcar, 2 kg de judías
y 4 litros de aceite. Estos
últimos días hemos recibido leche en polvo y unos sobres de sopas que hemos unido a aquellos
productos . También la comunidad cristiana ofrece lo que puede: verduras,
patatas, arroz,… Con esta ayuda a menos los días de Navidad tendrán lguna cosa que comer.
Es una actividad bonita, no sólo por la ayuda material, sino
por el hecho de visitar, hablar escuchar, rezamos alguna oración –a estas
visitas siempre vamos un grupo de
cada comunidad- y nos reímos con la
alegría de las familias
visitadas. A pesar de los años que llevo en este continente, me sigue
impresionando la pobreza en vive tanta gente . De estas actividades os
mando alguna foto, para que
tengáis una constancia gráfica de
lo que hacemos. Todo esto es posible por las ayudas que nos llegan de unos y otros, las vuestras.
Cada día en nuestras comunidades
nos expresan de mil maneras el
agradecimiento por lo que hacemos. Ese agradecimiento es también para vosotros. Que
Dios os pague todo el bien que
hacéis y os bendiga en todo momento.
Khanimambo, inkomu, hi khensile,
hi bonguile… son todas maneras de
dar las gracias en la lengua
changana.
GRACIAS A TODOS.
Paco González desde la
Parroquia de Santo António
de Sábie en Mozambique