La Congregación de los Sagrados Corazones quiere que sea
el “año Damián” en recuerdo del gran apóstol de los leprosos, San Damián de
Molokai, el misionero de su congregación que cuidó y murió por los leprosos. En
una carta dirigida a toda la Congregación, el Superior General de los Sagrados
Corazones, Javier Álvarez-Ossorio, ha recordado a los miembros de sus
comunidades en todo el mundo que “en 2014 se cumplirán 150 años de la llegada
de Damián a Honolulu, el 19 de marzo de 1864, y de su ordenación presbiteral,
el 21 de mayo, cuando tenía 24 años de edad. Celebraremos también los 5 años de
su canonización, que tuvo lugar el 11 de octubre del 2009”.
La celebración de este año se presenta con dos
dimensiones: servicio a los pobres y adoración, algo que recoge la
espiritualidad en la que bebió el padre Damián. En cuanto al servicio a los
pobres, la Congregación de los Sagrados Corazones ha puesto en marcha algunas
iniciativas como la creación de una comunidad internacional en Lovaina,
Bélgica, muy volcada en los marginados y en los presos. La puesta a disposición
de Caritas Roma de habitaciones de la Casa General de la Congregación. Ayuda a
Siria con la compra de ropa de invierno para niños…
Se invita a los religiosos, en la dimensión de adoración,
a tener todos los días un momento de adoración diaria ante la Eucaristía, y a
reunirse todos juntos, también en adoración, desde todas las comunidades
esparcidas por el mundo, el 9 de mayo de 2014. Según explica el Superior
General, “la idea es que estemos todos en el mismo momento orando ante el
Santísimo Sacramento, como signo de nuestra comunión en el ministerio de la
adoración”.






















































