En febrero pasado tuvo lugar en Hakha, Myanmar, la
ordenación episcopal de Mons. Lucius Hrekung, nuevo obispo de esta diócesis,
con la presencia de 15 obispos, 157 sacerdotes, 113 religiosos y más de 4.000
católicos y cristianos de otras denominaciones. Estos últimos pospusieron sus
servicios religiosos para unirse a la ceremonia, mostrando así un signo de
unidad y armonía.
El arzobispo de Yang, Mons. Charles Bo, presidió la
celebración y, en su homilía, recordó lo que ha sido la historia de los
seguidores de Cristo en Chin Hills, la zona montañosa del este de Myanmar donde
se encuentra Hakha.
En su homilía Mons. Bo recordaba lo que ha sido la
historia de los 50 años de la diócesis de Hakha. “Es la historia comenzada por
los Misioneros de las Misiones Extranjeras de París y que continúa hoy con los
obispos, sacerdotes, religiosos y laicos indígenas. Mons. Lucius es fruto de
esta historia”, señalaba. “En este año, la Iglesia en Myanmar celebra el 500
aniversario de su viaje de fe en esta tierra. Nuestros antepasados dieron sus
vidas para sembrar la fe en ella. En la historia de la Iglesia en Myanmar,
hemos perdido muchas cosas, pero hemos mantenido firmemente la fe”.
El nuevo obispo, que tiene como lema “Venga tu Reino”,
nació en 1959 en la pequeña población de Hnaring, en esta misma región montañosa
de Chin Hills. Se ordenó sacerdote de la diócesis de Hakha en 1989.