El Seminario Mayor del Espíritu Santo es el centro de
formación más importante de la Iglesia católica en Bangladesh y, con 40 años
recién cumplidos, forma parte ya de la historia de la misión y de la evangelización
en este pequeño pero superpoblado país de Asia.
Al finalizar el 2013 este seminario conmemoraba su
fundación con una conmovedora ceremonia. Una procesión de 40 velas recordaba
que esta institución, cada año, ha dado a la Iglesia de Bangladesh luz propia
con los jóvenes que en ella se formaban. Y quienes llevaban las velas hacían
más verdad esta afirmación: obispos, formadores, antiguos rectores y
seminaristas. Todos ellos, empezando por quien presidía la ceremonia, el
arzobispo emérito de Dhaka, han pasado años en este seminario. Mons. Paulinus
Costa, como emérito, el más anciano, fue nada menos que su primer rector.
Los obispos de seis de las siete diócesis de Bangladesh
estudiaron Filosofía y Teología en las aulas de este seminario dedicado al Espíritu
Santo. El séptimo, el arzobispo de Dhaka, no se formó en él, por haberse
ordenado sacerdote antes de que se creara, pero es quien más desvelos le dedica
por estar en su diócesis. Esto hace que en muchos sentidos este seminario sea
la “Casa de la Iglesia” en Bangladesh. Entre sus alumnos también hay miembros
de las tribus y minorías étnicas. El obispo de Dinajpur, que fue su
vicerrector, es santal – minoría en Bangladesh, aunque muy extendidos en la
India – y Mons. Paul Ponen Kubi, obispo de Mymensingh, es adhivasi. La
catolicidad – la universalidad de la Iglesia – se hace realidad también a nivel
local en Bangladesh.
Durante 40 años las Obras Misionales Pontificias -
específicamente la Obra Pontificia de San Pedro Apóstol o de Vocaciones Nativas
– han contribuido a que este seminario fuese una realidad. Este año han sido
38.570 dólares los enviados para sostener a sus 58 seminaristas, pero ni un
solo año ha faltado en este sostenimiento la generosidad de los católicos con
las vocaciones. Además en sus primeros años se financió su construcción, como
ha ocurrido con las sucesivas ampliaciones. Sin duda, una ayuda bien invertida,
vistos los frutos, nada menos que 300 sacerdotes ordenados. Cualquier católico
podrá colaborar con la Obra de San Pedro Apóstol, el próximo 27 de abril,
cuando se celebrará en España.
Tras la procesión con las 40 velas y la celebración
eucarística, tuvo lugar un programa cultural lleno der color donde se repasó la
historia del seminario: sus comienzos con sólo 5 alumnos, el primer sacerdote
ordenado, la bendición de los primeros edificios y las muchas anécdotas
contadas por el arzobispo emérito de Dhaka, Mons. Costa, quien fue 19 años su
rector. Todos dieron gracias a Dios por el seminario, por la generosidad de
quienes lo han apoyado estas cuatro décadas y por la fidelidad a la vocación de
300 jóvenes bangladesíes.