La ONGD de los Agustinos Recoletos Haren Alde ha
presentado al Ayuntamiento de Pamplona un proyecto para dotar de agua potable a
los más de 300 habitantes de Pichugan, localidad del distrito de Chiguirip, en
Perú, por valor de 66.372,77 euros, de los que 45.248,73 quedarían financiados
por el consistorio pamplonés.
El proyecto “Más agua, más vida en la comunidad de
Pichugan, Distrito de Chiguirip” pretende contribuir a mejorar la calidad de
vida de la población mediante la construcción de un sistema de agua potable por
gravedad, aprovechando los manantiales existentes en las partes altas. Este
nuevo sistema de agua podría ponerse en marcha en cinco meses.
En caso de aprobarse este proyecto, cada familia de la
comunidad contará con un grifo de agua potable en su casa que permitirá mejoras
en sus hábitos de higiene así como la eliminación de los graves riesgos que
corren actualmente por el consumo de aguas contaminadas no potabilizadas.
Haren Alde tiene una gran experiencia de dotación de
sistemas de agua potable y saneamiento en esta región peruana. Junto con la
obra de infraestructura, se lleva a cabo un programa de formación y de
conformación de Juntas Administradoras de Servicios de Saneamiento (JAAS), que
son los encargados de la gestión y la formación de las familias que reciben el
agua en sus casas y de los escolares, para que puedan desarrollar hábitos
higiénicos saludables y reconozcan su derecho a la salud y al uso de viviendas
saludables.
El proyecto será desarrollado en la comunidad rural de
Pichugan, Distrito de Chiguirip, Provincia de Chota, Departamento de Cajamarca,
en Perú. Cuenta con 103 familias (390 personas) cuyos ingresos económicos son,
en su mayoría (59.2% del total), menores a 100 nuevos soles (28,29€) mensuales,
procedentes de sus actividades agrícolas y ganaderas. Una pequeña parte de la
población se dedica a la artesanía (tejidos, sombreros, etc.) y a la
elaboración de quesos.
En el Distrito de Chiguirip el 13,4% de la población es
analfabeta, el 16,4% tiene primaria incompleta y sólo 23% tiene primaria
completa. El analfabetismo es mucho más marcado en el sexo femenino. La calidad
de la educación, especialmente en las zonas rurales, como lo es la de
intervención del proyecto, continúa siendo uno de los problemas más graves.
Actualmente, una de cada cinco familias se provee de agua
directamente de ríos, acequias o pozos. Más del 80% de las familias consumen
agua no segura, y sólo el 18% manifiestan hervir el agua previamente a su
consumo. El peligro aumenta dado que no existe una conciencia de gestión de
basuras y desechos y por el uso ganadero de las tierras que contamina los
acuíferos.
El acceso al agua potable eliminará los riesgos de enfermedades
infecciosas y contagiosas y de parasitosis, especialmente entre los más
pequeños, así como de diarreas infantiles y otras dolencias relacionadas con el
consumo inapropiado del agua.
El proyecto ha conseguido unir a la sociedad civil, a las
autoridades políticas (el ayuntamiento local aportará al proyecto 4.667,61
euros) y a las familias en su afán por mejorar la salud y la calidad de vida de
sus propios miembros. Todos ellos se han comprometido a una participación
activa en sus diferentes fases: construcción de infraestructuras, mantenimiento
posterior, mejora de los hábitos de higiene y prevención, formación de gestores
para las redes de distribución con posterioridad a la ejecución del proyecto.