Este 21 de septiembre se abren las celebraciones por el
centenario del fundador de la familia guaneliana, San Luigi Guanella. Se abrirá
en Roma con una solemne celebración en la basílica de San Giuseppe al
Trionfale, presidida por el cardenal Joao Braz de Aviz, prefecto de la
congregación para los institutos de vida consagrada.
Luigi Guanella fundó los Siervos de la Caridad – más conocidos
como Obra don Guanella – y las Hijas de Santa María de la Providencia, con la
ayuda de la Beata Chiara Bossatta, instituciones que cuentan con innumerables
centros de apostolado esparcidos desde Nigeria, Congo y Ghana hasta Filipinas,
Vietnam y Guatemala, todos centrados en la ayuda a los más pobres y
desfavorecidos, verdadero carisma de los “guanelianos”, porque, como decía su
fundador: “un corazón cristiano que cree y que siente no puede pasar ante las
necesidades del pobre sin socorrerlas”.
Durante este año se sucederán diversas iniciativas, como
el curso comenzado el pasado 18 de agosto, que durante un mes está recorriendo
en los fundamentos bíblicos y teológicos, las fuentes y los lugares natales del
fundador… Encuentros en las comunidades guanelianas para invitar a una
experiencia concreta de su carisma en la misión.
Como subraya su vicario general, P. Umberto Brugnoni, hoy
como hace cien años el mensaje de San Luigi Guanella es sinónimo de
benevolencia, corazón misericordioso, ternura, paternidad, espíritu de familia:
“Impacta la actualidad de su mensaje si pensamos en la cultura actual y en los
aspectos más subrayados por el Papa Francisco”.
El carisma no se puede definir sino que se cuenta con la
propia vida, por eso, en los diversos actos, abundarán los testimonios, como el
del P. Stephen Onyeks, en Kinshasa, donde ser guaneliano significa estar junto
a los chicos de la calle y devolver la dignidad a los niños discapacitados…