La Iglesia católica en Gabón está de luto por el
fallecimiento, el pasado 17 de abril, de la hermana Josefa María García, de la
congregación de la Inmaculada Concepción de Castres. La hermana, de 83 años,
que ha fallecido tras una breve enfermedad, había dejado su España natal para
marchar a Gabón cuando tenía 20 años. Ha dedicado toda su vida a la educación
de chicas jóvenes, a las que siempre ha permanecido muy cercana. Nacida en
Tarazona, Zaragoza, el 21 de mayo de 1930, desempeñaba su labor misionera en la
diócesis de Port-Gentil.
En la catedral de Libreville, dedicada a Nuestra Señora
de la Asunción, la Iglesia de Gabón ha celebrado un emotivo funeral en su
recuerdo y en recuerdo también de un sacerdote gabonés, fallecido también estos
días, que ha sido un ejemplo de entereza durante el padecimiento de una larga
enfermedad. La misa ha sido presidida por el arzobispo de Libreville, Mons.
Basile Mvé Engone, con la presencia de Mons. Mathieu Madéga, Obispo de Mouila y
administrador apostólico de la diócesis de Port-Gentil, de Mons. Dominique
Bonnet, Obispo emérito de Mouila, de numerosos sacerdotes, religiosos y
religiosas. En su homilía, Mons. Basile recordaba que la hermana Josefa, que
llegó tan joven a Gabón, “ha amado esta tierra más que a su tierra natal,
España”, por lo que tenía la nacionalidad gabonesa. Numerosos testimonios han
alabado la labor de esta religiosa que dedicó su vida a formar “las mujeres del
mañana”, como señalaban sus hermanas de congregación, las hermanas azules, a
formar “mujeres completas”.
