Una de las regiones más pobres de Brasil se vuelca en la
ayuda a una de las regiones más pobres de África bajo la máxima “Hay más
alegría en dar que en recibir”. Por eso la octava feria misionera de Tapauá, en
el Amazonas, Brasil, se ha centrado en la misión de los agustinos recoletos en
Kamalo, Sierra Leona.
Según informan los agustinos recoletos, la Parroquia
Santa Rita de Tapauá, en el brasileño estado de Amazonas, depende en buena
parte para su funcionamiento de las ayudas que recibe del exterior. Está en una
de las zonas más aisladas por geografía y cultura de Brasil, en la Amazonia;
pero muestra año tras año su corazón generoso, sensible y abierto a quienes
necesitan aún más que ellos. El pasado 25 de octubre esta parroquia dirigida
por los agustinos recoletos celebró su VIII Feria Misionera, cuya apertura se
produjo en las comunidades de base de Nuestra Señora de Aparecida y de San Juan
Bautista con la preparación de un desayuno solidario en la mañana del sábado. A
las cinco de la mañana, poco antes del amanecer, todos se reunieron en la plaza
de la iglesia parroquial para hacer una oración comunitaria por los niños y
familias de Kamalo, una de las dos misiones de los agustinos recoletos en la
provincia Norte de Sierra Leona, en África Occidental.
En este momento se aprovechó para la venta del desayuno
solidario, que consistió en bizcochos, chocolate, bocadillos, tapioca y zumos.
Mientras tanto, las otras comunidades de base situadas en la parte urbana de la
parroquia, San Agustín, San José y Santa Rita, iniciaban también su
movilización para preparar la cena solidaria de la noche.
Durante esta cena, que se llevó a cabo en la misma plaza,
se organizó una fiesta con varias presentaciones de danza y música. Así se
consiguió atraer a muchos de los habitantes de la localidad que se sumaron al
festival solidario, con participación ecuménica de algunas iglesias no
católicas de la localidad.
Los religiosos recoletos recordaron la opción por los
pobres que debe llevar a la Iglesia y a los cristianos a acciones que mejoren
la vida de los pobres, acciones que son la “manifestación del amor del Señor
por los humildes”. “La prioridad de la evangelización se materializa y se
encuentra a través de la defensa de los derechos de los pobres”, se dijo
durante la feria.
Diversos grupos pastorales y sociales hicieron sus
presentaciones musicales: la Infancia Misionera con los niños solidarios con
los niños de Kamalo, el Centro Esperanza, las comunidades de base de San José,
San Juan, Nuestra Señora de Aparecida, San Agustín y la parroquia como un todo.
La Feria Misionera recaudó así un total de 2.559 reales brasileños (840 euros)
que serán enviados a la misión de los agustinos recoletos en Kamalo.